Héctor Garzó, campeón del mundo de MotoE
El de Paterna sentenció el Mundial con su cuarto puesto en la carrera 1 de Misano
Héctor tenía las cosas claras y para ello ha trabajado durante todo el verano. Quería llegar a Misano y coronarse como campeón del mundo. Y vaya se cumplió con el objetivo y de qué manera. El valenciano no quiso esperar a la última carrera de la tarde y por la mañana ya hizo lo que tenía que hacer.
Héctor Garzó se convirtió ayer en el primer campeón del mundo de MotoE del motociclismo valenciano, y el tercero para España en seis ediciones del certamen de motos eléctricas.
Con 38 puntos de ventaja sobre el segundo y 50 en disputa, el valenciano era el favorito entre los cuatro con posibilidades matemáticas. Tras clasificarse en octavo lugar de la parrilla el viernes, logró escalar en carrera hasta el cuarto lugar que le convertía en campeón, pasara lo que pasara en la carrera de la tarde. Fue determinante la caída de Kevin Zannoni (Openbank Aspar), a falta de dos vueltas cuando lideraba al grupo, y que dejó al valenciano en esa cuarta posición clave para el título -un quinto puesto hubiera aplazado el desenlace-, tras haber adelantado poco antes a Jordi Torres. Tras cruzar la meta se desató la euforia, bajo el casco y también en su garaje.
El piloto de Dynavolt Intact consuma una temporada más que brillante, con cuatro victorias, tres segundos y dos terceros puestos, con un doblete de victorias en Sachsenring (Alemania) que le catapultó hasta el liderato que ha defendido hasta Misano, en las 16 carreras y ocho citas del Mundial de MotoE 2024. “Creo que me merezco este título porque este año ha sido una locura y he estado al máximo nivel. Creo que me merezco esto y más. No tengo palabras”, dijo el valenciano desde Misano.
“La sensación es increíble. Este fin de semana ha sido un poco loco en cuanto a emociones. Creo que lo hemos gestionado bastante bien. Aquí no hemos ganado, pero todos los podios seguidos que hemos hecho creo que ha sido la clave para llegar aquí y poder ser campeón”, concluyó el valenciano.
